Las guarras son las mejores porque no tienes que preguntarte si vas a echar un polvo después de la cita, ya que te estará chupando la polla desde el momento en que se suba a tu coche hasta que decidas no malgastar el dinero y llevarla a tu casa, donde podrás follártela a tope y dejarla con una corrida interna que se tragará antes de llevártela de vuelta a casa.