Nasty apenas tiene 18 años y ya se ha ganado su nombre. Se deja los zapatos puestos cuando su novio se la folla por si se cansa de ella y quiere mandarla a casa en medio de toda la acción. Él es lo bastante listo como para asegurarse de que ella siga siendo humilde, así que follará lo mejor que pueda de principio a fin cada vez que él se moleste en prestarle atención.