Cuando estos tipos de la construcción entraron en la sala de reconocimiento, la traviesa enfermera Lindsey Olsen supo exactamente qué hacer. Ella diría que su ego estaba más magullado que su tobillo, así que para que volviera a la obra decidió follarse esa polla y ¡darle una historia que contar! Lindsey levanta la pierna sobre la mesa de exploración para que él pueda ver cómo su polla entra y sale de esa estrecha raja mientras se la folla hasta que se corre por todo su coño.