A Vyxen Steel le encanta el bronceado, así que pasa varias horas a la semana trabajando en su bronceado. Hoy, su sesión se ve interrumpida cuando llega su amante. Se mete de golpe en ese coño mojado, doblándola en dos para poder llegar lo más profundo posible. La recompensa de Vyxen por ser tan buena folladora es una boca llena de semen.