Alyson Queen nunca superó realmente el sexo del instituto, porque cuando tenía dieciocho años y dejaba que todos los jugadores de fútbol le follaran las tetas, les excitaba tanto la sensación de sus pechos, que nadie llegaba siquiera a su coño. Puede que se lo follaran con los dedos, pero bastaba con ver y tocar sus tetas para que se corrieran cada vez.