Cuando la cámara se acerca, observa la mirada de determinación en los ojos de esta zorra. Le mira fijamente al estómago como si quisiera poner sus labios contra él con su polla metida hasta el fondo de la manga de su garganta. Puede que tenga el coño pelado, pero también la garganta, y está dispuesta a usar la que le haga correrse más rápido.