Bajo el sol del verano, el pelo rubio de Jill parece un poco más claro de lo habitual, pero no está decolorado. Lo único que huele a lejía en este vídeo es el cubo de semen que Randy Spears le rocía por toda su preciosa cara. Jill es una de las mejores chupadoras de pollas del planeta y no parará hasta obtener su recompensa. ¡Seguro que es una soldado!