malibu's most latin

Escena 1

Las credenciales latinas de Jayna se muestran en todo su esplendor cuando hace la lambada DP mientras dos artistas masculinos se ensañan con sus estrechos agujeros. ¡La tratan como la piñata porno que siempre quiso ser!

Escena 2

Kaylynn suele tirarse a mexicanos de su ciudad natal. Los recoge fuera de Home Depot y les paga como jornaleros para que le aplasten el coño con sus pollas. Hoy la han contratado para una escena con un surfero rubio y parece totalmente confusa sobre cómo satisfacer sus deseos.

Escena 3

En su sofá amarillo, con su gorra de chófer, Jennifer Luv deja que un completo desconocido le llene el cuerpo de su semilla tras recogerla en el aeropuerto por un módico precio. La verdad es que no voló a ningún sitio, ¡sólo quería que un conductor de limusina se la follara hoy!

Escena 4

Jenaveve tiene uno de los coños más sucios del porno actual. Después de que se la follen bien y a fondo, saca los dedos de su coñito y salpica grasa de coño por todo el interior de sus muslos. ¡Se ha convertido en un juguete sexy y viscoso!

Escena 5

Con Jennifer en la polla y Lola en la cara, este tío debe de sentirse como el primer balancín latino del mundo. Las chicas rebotan arriba y abajo intentando cabalgar sobre él y cuando se harta de sus payasadas, le da la vuelta a la tortilla azotando a una desde abajo mientras anima a Lola a que le meta la lengua en el culo a su amiga.

Bonificación Escena 1

Cuando queda mucho tiempo y todos los chicos se han vaciado, las chicas te llevan entre bastidores para enseñarte el plató y echarse unas risas juntos.

Bonificación Escena 2

Las chicas tienen un rato para ellas solas para hablar de su día y tú tienes un rato detrás de la cámara viendo todo el trabajo duro que supone follarse a una puta profesional como es debido.

Bonificación Escena 3

Puede que los tíos estén cansados, pero a la boca de Jennifer Luv le queda mucha energía. Conoce a su novia en la vida real mientras las dos chupan coños para tu placer e intercambian largos hilos de saliva para complacerse mutuamente al mismo tiempo.

Bonificación Escena 4

Ninguna de estas chicas puede irse a casa hasta que se haya corrido. No se aceptan fingimientos. A cada una se le entrega el arma de su elección y se le dice que luche contra sus demonios interiores. El resultado es un juguete que hace crujir los huesos, ¡una caja de bazofia húmeda tras otra!