La superestrella Nikki Hunter es una leyenda viva del mundo del porno. Siempre disfruta de sus sesiones fotográficas y le encanta que la filmen desnuda. Cuando esta rubia de cuerpo espectacular posa para la cámara, los hombres que la rodean se ponen cachondos con sólo mirarla. Con una polla en el culo, el coño y la boca, Nikki grita de placer cuanto más la llenan de erecciones.