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Escena 1

Katsumi es la primera y demuestra perfectamente el arte de la preparación. Sabe que, como puta asiática, es su responsabilidad asegurarse de que su culo se ha precalentado y aflojado antes de que su hombre entre en la habitación. Su hombre nunca debe hacerse esperar, ¡y ella lo sabe!

Escena 2

Nyla Thai se frustra mucho cuando oye a las putas americanas quejarse de que les duelen los agujeros. En su país natal, a Nyla le follaban el culo, el coño y la boca docenas de hombres cada día. Nunca se quejaba porque las putas asiáticas saben lo importante que es tener buenos modales de puta.

Escena 3

Roxy Jezel se junta con una zorra americana porque esta zorra rubia no ha estado muy servicial últimamente. Cuando a un par de tíos negros les apetece meter caña, saben que su zorra rubia tiene que ser totalmente complaciente. Roxy está aquí para recordarle lo que eso significa realmente.

Escena 4

La sumisa bondage Dana Vespoli no es una zorra de un solo truco. Sólo porque le guste que la azoten, le pincen los pezones, la azoten y la humillen... ¡eso no significa que sea incapaz de actuar como una acompañante de lujo cuando se le da la oportunidad de entretener a un hombre rico en su retiro de fin de semana!

Escena 5

Dicen que las mujeres asiáticas no beben. Es un estereotipo falso. Aunque es cierto que a la mayoría no les gustan las bebidas alcohólicas, las putas como Keeani Lei siempre están dispuestas a beberse un buen vaso de semen. Al fin y al cabo, ¡los orientales inventaron el Bukkake!